Esteban, de Mathieu Bonhomme: un héroe adolescente en el fin del mundo
05/02/2016
Con la publicación del segundo tomo integral se completa el primer ciclo narrativo de Esteban, una atractiva historia de aventuras marítimas ambientada en la Patagonia de comienzos del siglo XX. Este viaje iniciático de un chico indio a bordo de un navío ballenero está llena de emoción, acción y aroma a mar, lo que, unido a su dinámico dibujo, hace de ella una lectura perfecta para amantes del género de todas las edades.
Hace más o menos un año nos llevamos una agradable sorpresa al descubrir las aventuras de Esteban, un joven nativo de la ruda Tierra del Fuego que se enrola en el Leviatán, un barco que se dedica a la caza de ballenas, en el año 1900. Una época y un lugar difíciles para ser un adolescente, por lo que tendrá que madurar y aprender para salir adelante. Conocíamos el trabajo gráfico de su autor, el francés Mathieu Bonhomme, por obras anteriores como El marqués de Anaon o Omni-visibilis, pero nos eran ajenas sus capacidades como narrador, destrezas que quedan demostradas al embarcarse en una historia compleja y atípica como la que hoy nos ocupa.
Al igual que otros títulos (sin ir más lejos El puerto prohibido, recientemente comentado en esta página) en Esteban encontramos una modernización de lo clásico, un relato heredero de la narrativa de Jack London o Herman Melville en la que observamos al hombre frente a una naturaleza dura y difícil, que es el escenario y el motor de sus andanzas, una historia que recoge elementos recurrentes del género de aventuras pero que va más allá.
Y es que son muchos los atractivos que apreciamos en la travesía del intrépido Esteban, desde la cuidada construcción de personajes hasta la crítica social presente en el tratamiento que los colonizadores reservan a los nativos, pasando por la documentada reproducción de la vida y las tareas a bordo de un gran ballenero. Esto último es otro punto importante en la historia, ya que la tripulación del Leviatán, un barco de madera a vela, conserva el romanticismo de su trabajo -arponean a mano y son conscientes de la necesidad de un equilibrio en la explotación de los recursos- y el respeto por los animales que cazan y por el mar en general, sentimientos que aparecen confrontados con el progreso a toda costa que representa un barco a vapor que emplea un cañón explosivo para cazar y que no posee la misma consideración por el ecosistema marino que nuestros protagonistas.
En los cinco álbumes que recogen estos dos integrales, realizados desde 2005 ata 2015, Bonhomme engancha a los lectores y lectoras con un texto inteligente lleno de giros narrativos que aportan emoción, ritmo e intensidad a la historia, pero también con un hermoso dibujo, limpio y trabajado, coloreado de manera estupenda por Delphine Chedru, que nos transporta a los fríos mares australes donde el Leviatán y sus hombres luchan por sobrevivir.
Y para terminar no podemos dejar de hablar del personaje que da título a la obra, alguien que es ya uno de nuestros personajes preferidos, por su valentía y capacidad para afrontar las adversidades, por su carácter amable y sencillo, por su lealtad hacia sus compañeros y también por el gran conocimiento que tiene de las leyendas orales de su tribu. Esteban, un héroe adolescente que fascinará a tod@s aquell@s que os sumerjáis en sus aventuras.
Esteban (Integral)
Mathieu Bonhomme
Norma Editorial
Tomos: 2
 en Esteban encontramos una modernización de lo clásico, un relato heredero de la narrativa de Jack London o Herman Melville en la que observamos al hombre frente a una naturaleza dura y difícil, que es el escenario y el motor de sus andanzas, una historia que recoge elementos recurrentes del género de aventuras pero que va más allá.Y es que son muchos los atractivos que apreciamos en la travesía del intrépido Esteban, desde la cuidada construcción de personajes hasta la crítica social presente en el tratamiento que los colonizadores reservan a los nativos, pasando por la documentada reproducción de la vida y las tareas a bordo de un gran ballenero. Esto último es otro punto importante en la historia, ya que la tripulación del Leviatán, un barco de madera a vela, conserva el romanticismo de su trabajo -arponean a mano y son conscientes de la necesidad de un equilibrio en la explotación de los recursos- y el respeto por los animales que cazan y por el mar en general, sentimientos que aparecen confrontados con el progreso a toda costa que representa un barco a vapor que emplea un cañón explosivo para cazar y que no posee la misma consideración por el ecosistema marino que nuestros protagonistas.En los cinco álbumes que recogen estos dos integrales, realizados desde 2005 ata 2015, Bonhomme engancha a los lectores y lectoras con un texto inteligente lleno de giros narrativos que aportan emoción, ritmo e intensidad a la historia, pero también con un hermoso dibujo, limpio y trabajado, coloreado de manera estupenda por Delphine Chedru, que nos transporta a los fríos mares australes donde el Leviatán y sus hombres luchan por sobrevivir.Y para terminar no podemos dejar de hablar del personaje que da título a la obra, alguien que es ya uno de nuestros personajes preferidos, por su valentía y capacidad para afrontar las adversidades, por su carácter amable y sencillo, por su lealtad hacia sus compañeros y también por el gran conocimiento que tiene de las leyendas orales de su tribu. Esteban, un héroe adolescente que fascinará a tod@s aquell@s que os sumerjáis en sus aventuras.Esteban (Integral)Mathieu BonhommeNorma EditorialTomos: 2 "Compartir en Facebook")
