André el Gigante, de Box Brown: el conmovedor retrato de un coloso convertido en icono popular

09/03/2015

Dentro del género biográfico, uno de los más destacados en los últimos tiempos, tienen un especial atractivo aquellas obras centradas en personajes extraños o ambiguos que están dentro del imaginario popular. Este es el caso de André el Gigante, un auténtico fenómeno de la naturaleza que fascinó al mundo en los años setenta y ochenta y que muchos y muchas de vosotros recordareis.

La lucha libre americana conoció su primer gran momento de éxito en España a comienzos de los años noventa, convirtiéndose en uno de los primeros emblemas de una de las cadenas privadas de televisión recién aparecidas. A pesar de llevar dos décadas disfrutando del favor del público en países como Estados Unidos o Japón, y formar parte indiscutible de la cultura popular en lugares como México, fue en ese momento en el que personajes como Hulk Hogan o el Último Guerrero se hicieron realmente conocidos entre nosotros.

Reconozco que siempre me parecieron más divertidos y entretenidos los combates mexicanos, con su exagerada teatralidad y sus espectaculares máscaras, que los estadounidenses. Pero en estos aparecía un luchador que me encantaba y que ya había entrado en la memoria colectiva de los niños y niñas que crecimos en los años ochenta a causa de su papel en la película La princesa prometida. Resultaba sorprendente por su desmesurado tamaño, que hacía de él un auténtico gigante, y a mí, además, siempre me tuvo cara de buena persona, como si fuera el protagonista bonachón de un cuento.

Se trataba, por supuesto, de André el Gigante. Un mastodóntico hombre de más de dos metros y veinte centímetros de estatura y un peso que sobrepasaba los doscientos cincuenta kilos y que, para nuestras miradas infantiles, convertía en reales a seres míticos como Sansón, Goliat, el increíble Hulk o el Coloso de Rodas.

Ahora, veintitantos años después de su fallecimiento, llega a nuestras manos André el Gigante. Vida y leyenda (Astiberri), una interesante biografía gráfica realizada por Box Brown, que recoge numerosas anécdotas y momentos destacables de la vida de este titán nacido en Francia en los años cuarenta. Desde su infancia hasta su dominio de la industria del wrestling durante más de una década, pasando por sus problemas personales o médicos. Aunque se permite ciertas licencias creativas, la afición del autor por la lucha libre hace que el libro entero esté notablemente documentado, y que resulten especialmente emotivas las reproducciones de combates televisados o de entrevistas al gigante, donde podemos apreciar también las melancólicas impresiones del propio Brown al dibujar estas escenas.

Esta colección de momentos, ordenada de manera cronológica, no es simplemente la vida de un hombre peculiar, sino que al mismo tiempo nos introduce en la parte menos visible de un espectáculo de masas que mezcla deporte, teatro y negocio. Y también reflexiona sobre las dificultades que muchas veces tienen aquellas personas que rompen con los estándares medios para llevar una vida normal. En el caso de André su acromegalia, la enfermedad que provocaba en él un descomunal crecimiento y lo convertía en un ser humano especial, era también la responsable de que tuviera problemas para desenvolverse en el día a día y que los últimos años de su vida estuvieran llenos de dolores y complicaciones médicas.

Con un estilo sencillo y limpio Box Brown consigue un retrato conmovedor que llenará de nostalgia a aquell@s que recuerden al gigantón de La princesa prometida y sorprenderá a los que no conozcan o se acuerden de este personaje, pero que busquen una historia curiosa y bien contada.

André el Gigante. Vida y leyenda
Box Brown

Astiberri
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